Por medio de la tecnología, nuestros pacientes tienen la opción de compartirnos vía correo electrónico una fotografía de cuerpo completo, con su nombre (o nombres) y apellidos, además de la fecha de su nacimiento. Con esta información nuestro equipo logramos resultados similares a cuando la cita ocurre de manera presencial. Terminado el estudio, a la persona se le envía por el mismo conducto una descripción de la situación que detectada, así como qué pasos hay que seguir para corregirla y las posibles consecuencias de la misma.